El Exodo: una realidad presente

Los versos que estudiaremos ahora son Isaías 43:14-21. Es impresionante cómo en estos versos, el exilio en Babilonia es explicado como un nuevo Exodo, seguido por un viaje de regreso a casa acompañado de la provisión, guía y protección divina.

Los títulos de Dios nos recuerdan algo de SU carácter para que seamos afirmados para  los momentos que vienen. Como Creador, volvemos a la hazaña del Génesis, el Dios que diseñó, que mantienen viva y sustenta a la creación y quien la dirige hacia un final determinado.

El título de Redentor, recuerda a quien ha estado a cargo en el momento del Exodo y en este momento también, es Aquel que toma como suyas las cargas de Su pueblo.

El título de Rey significa uno que conoce, que está como Padre de Su pueblo, aquel que tiene una relación personal con ellos.

En todo acto de Dios, tanto juicios como redención, es toda la Persona de Dios la que lo ejecuta, es Toda Su Naturaleza la que se ve involucrada, por eso no nos consume ni destruye...porque el Juez es también el Rey es el Amado.

Lo que también nos recuerdan estos títulos es que una liberación nacional no es suficiente para resolver el problema fundamental de permanecer con nuestros pecados delante de un Dios Santo. Nos inspira a mirar hacia adelante hacia una completa renovación espiritual que ya ha sido prometida (29:15-24).

En el vs 18 Dios nos habla del pasado. El pasado nos deja enseñanzas, pero no debe dejarnos atrapados! Debe impulsarnos a buscar lo que Dios está por hacer. Dios nos está invitando en este pasaje a vivir en el día de hoy la realidad del Exodo.

Las cosas pasadas es lo que Dios hizo en el Exodo. Las cosas nuevas es lo que Dios se proponía en ese momento a hacer...liberarlos de Babilonia.

El vs 21 habla del resultado de toda esta operación: debemos ver con confianza los problemas que se avecinan...solo son los movimientos de las manos del Alfarero dándonos forma para que al final quede un pueblo perfeccionado, digno testigo de la Corte Celestial por medio de su alabanza.