"Dentro de muy poco..." el yugo será quebrado a causa de la grosura..

(Isa 10:20)  Sucederá en aquel día que el remanente de Israel y los de la casa de Jacob que hayan escapado, no volverán a apoyarse más en el que los hirió, sino que en verdad se apoyarán en el SÑOR, el Santo de Israel.
(Isa 10:21)  Un remanente volverá, el remanente de Jacob, al Dios poderoso.(Isa 10:22)  Pues aunque tu pueblo, oh Israel, sea como la arena del mar, sólo un remanente de él volverá; la destrucción está decidida, rebosando justicia.

(Isa 10:23)  Pues una destrucción completa, ya decretada, ejecutará el Señor, Dde los ejércitos, en medio de toda la tierra.(Isa 10:24)  Por tanto, así dice el Señor, Dde los ejércitos: Pueblo mío que moras en Sion, no temas al asirio que te hiere con vara y levanta su báculo contra ti a la manera de Egipto.(Isa 10:25)  Porque dentro de muy poco mi indignación contra ti terminará, y mi ira la dirigiré a su destrucción.

(Isa 10:26)  Y el SEÑOR de los ejércitos levantará un azote contra él como la matanza de Madián en la peña de Oreb; (Nm 31) su báculo estará sobre el mar y lo levantará de la manera que lo hizo en Egipto.

(Isa 10:27)  Y sucederá en aquel día que su carga será quitada de tus hombros y su yugo de tu cerviz, y el yugo será quebrado a causa de la grosura.

LLegamos a una etapa muy interesante en nuestro viaje asignado por 18 meses de parte del Señor por declaración profética. En efecto, la palabra que fue dada de parte del Señor es que intercederíamos por 18 meses para que el enemigo del Sur fuera derrotado en territorio salvadoreño, con una derrota tan grande que impactaría Latinoamérica. El Señor está trayendo liberación a Latinoamérica y el Remanente de cada uno de estos pueblos tiene un rol especial que cumplir. Nuestros hermanos Venezolanos han sufrido muy de cerca este yugo y nosotros un poco a la distancia, pero lo hemos sentido. Nuestros hermanos Venezolanos tienen un rol en lo natural que cumplir y nosotros otro, el nuestro todavía se pelea en las urnas de votación.

La Palabra para esta semana enfatiza la frase "Solo un remanente volverá". En mi entender, no se trata solamente de ser llamados a pelear la batalla de Jehová, que en efecto siempre la pelea solo el remanente; sino que creo que el Señor habla de la expresión del cristianismo que quedará una vez pase la amenaza. Me parece que el Señor habla de cómo los verdaderos creyentes en esta nación son tan solo un remanente, a pesar de que vemos grandes movilizaciones de cristianos en conferencias y otras actividades. Creo que el remanente habla un lenguaje parecido a los vencedores del Apocalipsis. Aquellos quienes permanecieron en pie, apasionados y comprometidos con el Señor, incluso sufriendo pérdida y sufrimiento intensos con tal de permanecer fieles al Señor. Dios quiera considerarnos parte de Su remanente! De verdad espero que nos haya encontrado fieles.

Es mi opinión que Dios está ahorita mismo comenzando una gran ofensiva contra nuestro enemigo y debemos decidir que estrategia seguir, ya que el maligno espera que bajemos la guardia por las festividades. Pero el remanente no baja la guardia, siempre están de alta en servicio de Jehová Gibor. El Señor me dió palabra de que venía con poder en el mes de Febrero...y creo que nosotros formamos parte del equipo que ocasiona la venganza del Señor contra Madián.

En la palabra profética de este mes dice que "Decretamos una puerta de oportunidad y de favor entre los días 20 al 31 de este mes. Habrá provisiones extraordinarias, cancelaciones de deudas, decretamos el mejor cierre de año para los hijos del Rey" Creo que esta ventana de tiempo es clave para finalmente derrotar al enemigo y arrebatar el botín, que es mucho. Es un botín que permitirá el avance del reino para los próximos años.

El tema de oración está decidido: La destrucción está decretada para el enemigo del Sur. Que tu indignación contra nuestros pueblos termine, oh señor Diso Todopoderoso. Dirige Tu ira a su destrucción.

Y el Señor dice que "Dentro de muy poco..." Esta frase es muy especial porque no creo que se trate solo de tiempo de reloj (humano) sino que además depende de la cantidad de oración que llena las copas de incienso en los cielos para que la ira de Dios sea derramada. ¿Cuánta oración es esa? No lo sabemos, pero sabemos que Dios nos dará la estrategia específica para que la parte de incienso que nos corresponde agregar, la cumplamos. También lo que a mi me dice es que NO PODEMOS PARAR LA ORACION HASTA QUE ESTO SUCEDA, PORQUE LA DESTRUCCION ESTA DECIDIDA Y SE ACTIVARA CUANDO EL PUEBLO DEL SEÑOR SE PONGA DE ACUERDO Y LO DECLARE, SE ACTIVE EL DECRETO, A CAUSA DE LA UNCION.

Esta unción que rompe el yugo es la combinación del llamamiento y delegación de autoridad que el Señor nos ha dado, del crecimiento en fe, perseverancia y revelación que hemos tenido a causa de nuestras propias pruebas y tribulaciones, y por supuesto de nuestra fidelidad en cumplir las estrategias que el Señor nos da con el objetivo de que Sus decretos se cumplan. Evidentemente habla de una cantidad de sabiduría y poder que estará siendo revelada, de la cua no habíamos escuchado antes. Definitivamente este yugo no es pequeño pero esta unción lo rompe. De manera que el otro tema de nuestra oración es:

(Eph 1:17)  para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo,  el Padre de gloria,  os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él, alumbrando los ojos de vuestro entendimiento,  para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado,  y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos,  y cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos,  según la operación del poder de su fuerza, la cual operó en Cristo,  resucitándole de los muertos y sentándole a su diestra en los lugares celestiales, sobre todo principado y autoridad y poder y señorío,  y sobre todo nombre que se nombra,  no sólo en este siglo,  sino también en el venidero; y sometió todas las cosas bajo sus pies,  y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia, la cual es su cuerpo,  la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.
 Señor, ¿Qué es este poder y esta fuerza? ¿Cuál es la medida de ella que debe ser aplicada ahora para la destrucción de este principado  que quiere expandirse sobre Latinoamérica? ¿Qué parte jugamos nosotros? ¿Qué tenemos que ver con los ojos de la fe para movernos en esa sabiduría? Señor, concédenos la unción que pudre el yugo de este principado sobre Latinoamérica. Somos tu pueblo, tu amado remanente...los que queremos ver tu gloria revelada en el semillero de misioneros para el mundo... Revive la gloria de los años 90 en los que hiciste caer el muro de Berlín como testimonio al mundo de que tu siempre tienes la última palabra...

(Luk 18:7)  ¿Y no hará Dios justicia a sus escogidos, que claman a El día y noche? ¿Se tardará mucho en responderles?

(Luk 18:8)  Os digo que pronto les hará justicia. No obstante, cuando el Hijo del Hombre venga, ¿hallará fe en la tierra?